jueves, 7 de noviembre de 2013

Bonitas casualidades

Rutina, rutina y más rutina. Cada día lo mismo, te cruzas con gente, ves cada día a quien preferirías que estuviera en la otra parte del mundo. Te sientes encerrada, agobiada, entre las cuatro paredes de una vida monótona y homogénea. Estas rodeada de gente sin más, es cierto que destacan personas que dan mucho por ti y tu por ellas, pero aun así crees que necesitas un giro para que esas personas que aprecias, las cuides y mimes de forma diferente.
Es entonces, cuando ves que no hay más caminos ni salidas cuando aparece alguien que da un giro radical. Irrumpe de golpe y poco a poco te va ganando, se va haciendo con una parte de ti y consigue ese aire renovador que necesitabas. Te ayuda a ver la vida de otra forma, a enfocar los problemas de manera que no te afecten tantísimo, te enseña a ver el lado bueno de las cosas, a que veas su parte positiva para que aunque haya problemas, puedas sonreír al menos una vez al día.
Desgraciadamente esas personas están en peligro de extinción y dar con ellas es como dar con un tesoro. Yo he tenido la suerte de dar con varias personas así de maravillosas que han ido apareciendo en el momento oportuno, haciendo de mi la persona que soy ahora. Creo sinceramente que no hay nada más real , sincero y bonito como encontrar a una persona que te haga evolucionar y sobretodo , y lo más importante, que te haga feliz.

No hay comentarios:

Publicar un comentario