Es aquella frase, aquellas 4 palabras que nunca queremos
oir, nos parece aceptar una realidad que no nos gusta. Ojalá esa
palabra fuera vetada y jamás fuera necesario utilizarla.Pero por
desgracia, es lo único que se puede decir cuando cometes el error de
hacer algo que quizás no deberías haberte planteado. Pero ¿y cuándo es
inevitable? a lo mejor es entonces el momento de mirar al suelo para
quitar las piedras del camino y no mirar tanto al cielo imaginando vidas
que no tendremos, sueños irrealizables, amores imposibles. Es esa
frase, ese " Ya te lo dije" lo único que nos devuelve a la tierra, que
nos fija los pies al suelo.
Y es que a veces, palabras verdaderas, que nunca nos diríamos a nosotros mismos, duelen.
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